Si el sionismo es la concepción de que el judaísmo es un pueblo y que como tal posee el derecho a la autodeterminación, materializado en la creación de un Estado propio (el Estado de Israel), el antisionismo es justamente el rechazo de esta concepción. Es la negación del derecho de autodeterminación del pueblo judío, de su conexión milenaria con la tierra de Israel y el rechazo a la existencia de un Estado judío allí. Por eso el antisionismo es una forma de antisemitismo.