Un genocidio es la realización de actos sistemáticos con el objetivo y la intención de destruir a un grupo nacional, étnico, racial o religioso. Israel está en guerra con la organización terrorista Hamas. No tiene el objetivo de eliminar a los más de dos millones de gazatíes.
En las guerras miles de personas mueren, tanto combatientes como civiles. Pero ello no implica que sean víctimas de un genocidio. Para que este se produzca, las palabras claves de la definición son el objetivo y la intención.
Israel podría bombardear edificio por edificio y asesinar en cuestión de minutos a los más de dos millones de gazatíes sin arriesgar la vida de sus soldados. Sin embargo no tiene la intención de hacerlo porque su guerra es con Hamas.
Y en ese sentido toma medidas para reducir al mínimo las bajas civiles, que nunca son nulas. Israel lleva a cabo una operación terrestre. Antes de cada ataque advierte a la población civil de la zona para que pueda evacuar. También crea corredores seguros y facilita la entrada de ayuda humanitaria.
